lunes, 31 de agosto de 2009

NUNCA DEBEÍS SUBESTIMAR LO PREDECIBLE QUE ES ESTUPIDEZ HUMANA

Cuidado, no pidáis una fanta de naranja en un bar! Puede haber pasado por manos de un portador de Gripe A o virus H1N1. Y no os sentéis sin haber limpiado la silla, alguien puede haberse sentado y esté infectado de esta pandemia social a la que el mundo desarrollado tiene alarmado. Tampoco pidáis coca-cola Zero, tendréis cáncer.

Parece que en Méjico no les va muy bien la cosa, han muerto personas por una gripe y parece ser que han contagiado a la humanidad. Pongámonos serios, la cosa está que arde.

Bueno, empiezo este blog con una frase muy acertada para el momento, sacada de Snatch, Cerdos y Diamantes (de Guy Ritchie, cuyo director la cagó haciendo RocknRolla, buena banda sonora y bofetadas, nada más). Parece que la gripe A esté infundiendo un miedo tremendo a la sociedad, llegando al extremo de psicosis para los países desarrollados y una pega más para la supervivencia en los países subdesarrollados. Como no, las autoridades de todos los países aparentan buscar medidas lo más rápido (¿y económico?) posible a dicha pandemia psicótica. Pongas el canal de televisión que pongas hay un debate sobre la gripe A, como enfrentarse a ella en nuestro medio social. El punto de mira recae en, ¿a quién administrar la vacuna?, ¿impedir a los niños ir a clase si se contagian o suspender las clases?, cuando - según dicen - la vacuna no está del todo comprobada en seres humanos, pero ya ha sido administrada a varias personas. No obstante, el día que se encontró el primer brote de gripe en un miembro de nuestro mundo mundial, las bolsas se abrieron al alza lideradas por las empresas farmacéuticasen América. Dichoso G20 que también fue por entonces, ¿Qué debatisteis? ¿Con qué país empezamos a propagar el miedo, digo, el virus?


La situación comienza a ser indignante cuando las alarmas de angustia se alborotan por que se hayan acabado las mascarillas cubre boca y nariz, familias enteras desprotegidas de esta enfermedad psicológica que acecha a mundo entero. Es triste reconocerlo, pero nos están metiendo tal presión que todo parece una conspiración contra nosotros, como siempre, para que acabemos cediendo a ser ratones de laboratorio. Pues no señor.

Sí es cierto que han muerto personas, pero no hace falta inyectar ese terror a toda la humanidad. Claro, juegan con las personas, al no saber a ciencia cierta que ocurre, nos inundan de pánico, sin darnos pie a reflexionar. Oh, vaya , se les olvidaba, cada día mueren cientos y miles de personas, ¿no es esa la verdadera epidemia? ¿Y qué me decís del virus VIH o Sida? –del cual no han encontrado aún una forma de erradicarlo por completo -. O, ¿olvidan la delincuencia y el terrorismo establecido en la misma Ciudad Juárez o donde narices te vayas de Méjico? -trato de Méjico por que es el epicentro de nuestro terror-.

De la misma forma, habiendo decretado el Gobierno de Méjico el estado de excepción, es decir, una movilización nacional a nivel económico, militar y policial y a todo el sistema nacional de salud, público y privado, la OMS ya ha calificado como nivel 5 la amenaza por el brote de gripe porcina, partiendo, de que la fase máxima es la 6 y dictaminando la evidencia de significativa transmisión humano a humano, la cual denota un contagio sonstenido de persona a persona en muchos países de un nuevo y serio tipo de enfermedad.

Escalofriante, ¿verdad? Más lo es si recordamos la gripe española (1918-1919) que se llevó entre 20 y 40 millones de personas, fue una gripe del pollo cuyo virus primero se mezcló con la gripe humana vulgar y después se adaptó sutilmente a nuestra especie. Y ahora, al cabo de 90 años, nos encontramos con una gripe mundial que arrasa sin detenerse… Quizás ocurra lo mismo que en 1976, cuando 500 soldados infectados con gripe porcina, no obstante, al paso de mes de contagio, el virus había “desaparecido de forma misteriorosa” según los investigadores.

De dicha forma, mantengo y constato: nunca debemos subestimar lo predecible que es la estupidez humana. Así que nada de tomar algo por ahí, nada de salir a la calle, nada de respirar y nada de viajar a Méjico. Declarado el estado de psicosis mundial